Aproximadamente 400 mil niños en México padecen este trastorno, el cual muchas veces se llega a confundir con una discapacidad auditiva.
Con el fin de destacar la necesidad que existe de mejorar la calidad de vida de todas las personas que padecen el Trastorno del Espectro Autista (TEA), también conocido como autismo, la Asamblea General de las Naciones Unidas estableció el día 2 de abril de cada año como el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo.
El Día Mundial del Autismo es conmemorado desde el año 2007 y busca promover la inclusión de las personas con autismo en todas las áreas de la sociedad de una manera justa y equitativa, donde se tengan los mismos derechos y se respete su dignidad.
Y es que, de acuerdo a la Organización Mundial de la Salud (OMS), 1 de cada 160 niños y niñas en el mundo tiene un Trastorno del Espectro Autista; mientras que en México, es 1 de cada 115, por lo que se calcula que alrededor de 400,000 niñas y niños mexicanos padecen de un TEA, de aquí la importancia de conmemorar el Día Mundial del Autismo.
El Trastorno del Espectro Autista (TEA) es un padecimiento relacionado con el desarrollo del cerebro, el cual impacta en la manera en la que la persona percibe y socializa con su alrededor, lo que deriva complicaciones en su interacción social y comunicación, tornando sus relaciones restringidas y/o estereotipadas.
Al ser muy amplio el abanico de manifestaciones y la gravedad de los síntomas que se presentan de persona a persona, se utiliza el término “espectro” cuando hablamos de autismo
Aunque el autismo no tiene una explicación totalmente clara y conocida, se cree que las causas del autismo pudieran surgir de una combinación de factores , entre ellos la genética heredada por nuestros padres, así como el medio ambiente en el que nos desarrollamos.
El autismo es una condición permanente que se manifiesta desde la primera infancia. Sin embargo, si los pacientes reciben un apoyo y se desarrollan en un entorno adecuado, pueden disfrutar de una buena calidad de vida, así como participar de forma productiva en la sociedad.
Pese a que los síntomas pueden variar, de acuerdo al espectro del autismo en el que se encuentre una persona, por lo general se puede apreciar en el bebé o niño:
Aunque ambos son padecimientos con causas diferentes entre sí, el Trastorno del Espectro Autista (TEA) y la hipoacusia o incapacidad para oír sonidos en uno o ambos oídos muchas veces pueden llegar a ser confundidos entre sí, derivando en un diagnóstico tardío y en un tratamiento inoportuno hacia el paciente.
Esta confusión en el diagnóstico se puede presentar debido a que tanto el Trastorno del Espectro Autista, como la hipoacusia tienen algunas características en común, sobre todo durante los periodos de lactancia y en edades preescolares.
Como mamá o papá, es importante permanecer atento a algunas señales que pueden ayudarte a identificar si tu bebé puede tener una pérdida auditiva y así acudir con tu médico para una revisión:
Algunas veces los padres ven a su bebé o niño inmerso en su mundo interior, sin prestarles atención o bien, presentando problemas del lenguaje. Esto conlleva a una incertidumbre sobre si su hijo padece un TEA o una pérdida de audición.
Como podemos darnos cuenta, muchas de las señales que muestra un niño con TEA y otro con pérdida auditiva son similares, por lo que un bebé o niño que presente síntomas de desarrollo del lenguaje debe pasar por una prueba de audiometría o tamiz auditivo para confirmar si pudiera tener una pérdida de audición temprana o de nacimiento.
Para que tu pequeña o pequeño pueda recibir un tratamiento específico a sus necesidades, la prueba recomendada por excelencia es el programa integral de tamiz auditivo, el cual identifica y da un seguimiento oportuno a una pérdida auditiva, y debe realizarse idealmente a las 24 horas de nacido o bien antes de salir del hospital.
El tamiz auditivo Áudi-k® es un procedimiento que se realiza de manera muy fácil y rápida. Identifica disfunciones auditivas y permite dar seguimiento a los bebés susceptibles a presentar pérdida de audición, permitiendo hacer una intervención oportuna en los diferentes grados de hipoacusia.
Áudi-k® no es una prueba invasiva y debe realizarse antes de dar de alta al recién nacido del hospital, de acuerdo a la Norma Oficial Mexicana NOM-034-SSA2-2013.
* Este tiempo no incluye la logística realizada por el hospital para entregar el resultado de Áudi-k a los pacientes.
¡Prevenir está en tus manos! Cuida la salud de tu bebé con nuestros programas integrales de tamiz neonatal que te ayudarán a descartar o detectar enfermedades de forma oportuna.
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